septiembre 16, 2011

Debemos modificar el actual sistema de pensiones

Esquema de capitalización individual está agotado. Presentamos reforma constitucional para poder optar por el sistema de reparto.

Junto a los senadores Isabel Allende, Ximena Rincón, Fulvio Rossi y Camilo Escalona hemos presentado un proyecto de reforma constitucional que pretende entregar a los cotizantes la opción de elegir entre un modelo de capitalización individual y alternativas de reparto. La inestabilidad que vive la economía internacional, a sólo tres años de la crisis anterior, ha  generado importantes caídas en las bolsas de todo el mundo y una enorme incertidumbre.
El dato más relevante es que la rentabilidad promedio de los fondos de pensiones, sigue declinando como lo revelan las cifras. Habitualmente, las estadísticas se realizan tomando o el inicio del sistema, que incluye el ciclo positivo de la salida de la debacle de los ’80 o el inicio de los multifondos, el 2002, que incorpora el período de salida de la crisis asiática. Ello desvirtúa los datos. Si no se toman esos períodos la rentabilidad de las AFP ha disminuido notablemente, al tiempo que no se han cumplido los supuestos bases del sistema, como era una menor rotación laboral y una mayor densidad de cotizaciones de los trabajadores.
Hoy, con la rentabilidad en torno a un 6-7% anual, una rotación laboral muy lejana al 70% proyectado y una densidad acumulada de imposiciones que apenas alcanza a 52% como porcentaje de meses de afiliación en que se registran cotizaciones; las AFP están muy lejos de entregar pensiones del 75% de las últimas remuneraciones como se prometió.
Según el Boletín de la Superintendencia, el número de pensiones pagadas en el mes de marzo de 2011 ascendió a 856.029 con un monto promedio de $175.215, de las cuales 418.678 corresponden a la modalidad de Rentas Vitalicias y 411.891 a la modalidad de Retiro Programado, con un monto promedio de $213.193 y $127.127, respectivamente.
Asimismo, el sistema tiene costos de administración altísimos. Es un sistema ineficiente y caro. Según estudios las administradoras y compañías de seguro han recibido, como primas y comisiones, uno de cada tres pesos cotizados por los afiliados desde 1981.
Es un sistema que fracasó rotundamente. Se trata, sin duda, del próximo lucro que hay que enfrentar en la sociedad chilena, como lo han hecho diversos países que ya han terminado con la capitalización individual en los últimos años.
Indicó que la reforma constitucional que promueve, junto a otros legisladores, tiene por objeto otorgar a los chilenos una alternativa de solidarizar sus riesgos de vejez, invalidez y sobrevivencia, pues se ha comprobado que el sistema de AFP sólo entrega pensiones suficientes a quienes pueden incrementar su ahorro con cotizaciones adicionales, lo que está muy lejano para la inmensa mayoría de trabajadores, que, con su nivel de ingresos, alta rotación y baja densidad, unido a los elevados costos de administración, recibirá pensiones miserables.

2 comentarios:

Hunter dijo...

Yo estoy de acuerdo que el antiguo sistema de pensiones no daba para más, estaba quebrado, claro, si dentro de las N Cajas de Previsión, había algunas que permitían jubilar con 10 años de servicios, otros casos, como los de parlamentarios, bastaba un período de 4 años para tener derecho a suculenta jubilación, así no hay sistema que resista. Vino entonces el sistema de AFP, que fue pintado como la octava maravilla y todos creyeron. Pero hoy, cuando el sistema está ya otorgando pensiones, ha quedado demostrado que éstas, con suerte alcanzan a un tercio del sueldo que el pensionado recibía en actividad.Para más, no tienen reajuste, al contrario, con los años la pensión disminuye al disminuir sus fondos, menos reciben aguinaldos.
Lo que es más indignante es que las AFP no pierden, sagradamente sacan sus comisiones y utilidades, aunque la rentabilidad de los fondos de los cotizantes se haya ido al suelo, sólo pierde el cotizante.
Además que hay una infracción a la igualdad ante la ley. El trabajador que no oyó los cantos de sirena y permaneció en el antiguo sistema recibe una pensión casi completa respecto a su sueldo en actividad, mientras que el pensionado por AFP recibe menos de u tercio. Un caso, dos profesores, en las mismas condiciones, el mismo sueldo, el que jubila por el antiguo sistema lo recibe casi completo y si ganaba 600 mil va a recibir practicamente eso, pero el otro, con suerte sólo recibirá 180 mil pesos.
Es buena la idea de cambiar el sistema, pero no creo que resulte, hoy por hoy los dueños de las AFP son los dueños de Chile y no hay poder que pueda oponérsele, pueden comprar conciencias a destajo.

Hunter dijo...

Por qué no han publicado mi comentario. Es censura?