El principal megadesastre para Magallanes han sido las decisiones del actual Gobierno.

El Presidente de la República, Sebastián Piñera, se ha referido hoy al conflicto que afecta a nuestra región, indicando que el Ejecutivo busca prevenir un agotamiento del gas, situación que, a juicio de la autoridad, sería un "megadesastre" para la zona austral.

Es bueno recordarle al Primer Mandatario diversas acciones la actual administración que han afectado a Magallanes. No hemos olvidado los recortes presupuestarios post terremoto y el severo impacto que eso provocó en el empleo y la actividad económica local; tampoco de la decisión de impulsar la salmonicultura que significará un grave deterioro ambiental y menos de los recientes despidos de funcionarios públicos y de la ENAP.

El principal megadesastre para Magallanes han sido las decisiones del actual Gobierno, el último de cuyos desaciertos ha sido el alza del gas, episodio en el que han actuado con prepotencia, falta de flexibilidad y engañando a la ciudadanía con verdades a medias, como la promesa de no incrementar los precios del gas, las diversas versiones sobre las reservas existentes y las estimaciones sobre el impacto del alza. Partieron diciendo que sólo implicaba $ 3.000 y ya van en $ 14.000 en todo el presupuesto familiar.

Si el Gobierno está tan interesado en evitar el agotamiento del gas lo que corresponde es que utilice los abundantes recursos de que dispone, producto del alza del cobre, para capitalizar ENAP e invertir en exploración en lugar de avanzar hacia su privatización y regalar las actuales reservas a los privados. Todos sabemos que en Tierra del Fuego hay gas, lo que se requiere es decisión y voluntad política para que sean explotadas por ENAP en lugar de traspasar el negocio a los particulares.

El Primer Mandatario ha llamando, además, a los magallánicos a deponer la violencia. El Señor Presidente está siendo mal informado por sus Ministros y autoridades locales, como ha ocurrido desde el comienzo de este problema. En general, las movilizaciones han sido pacíficas, considerando la gran convocatoria alcanzada. Mientras en Santiago hasta por un triunfo de la selección chilena se rompen paraderos, apedrean vehículos y queman mobiliario público, los magallánicos han dado un ejemplo de democracia, participación y civismo.

Evidentemente, hemos lamentado profundamente la muerte de dos jóvenes mujeres y las lesiones que afectan a una menor, pero se trata de un desafortunado y desgraciado hecho que ya ha sido esclarecido y que no ha sido ocasionado ni promovido por los organizadores y adherentes de este movimiento.