enero 10, 2007

Senador PS Pedro Muñoz presenta moción que regula el cierre de establecimientos comerciales en vísperas de feriados emblemáticos

Proyecto de Ley contempla limitar la jornada laboral en periodos inmediatamente anteriores a fiestas patrias, navidad y año nuevo





El senador Pedro Muñoz presento una iniciativa que contempla modificar el Código del Trabajo de manera que el cierre de los malls, centros comerciales, multitiendas y supermercados no podrán exceder las 22 horas entre el 8 y el 14 de diciembre; las 23 horas entre los días 15 al 23 de diciembre al igual que el 17 de septiembre ; y las 20 horas el 24 de diciembre y entre los días 26 y 31 del mismo mes.

Junto a lo anterior la moción incorpora sanciones con multas a beneficio fiscal de 14 a 70 unidades tributarias mensuales a los empleadores que incumplan la normativa relativa a extensión de jornada y cierre obligatorio de establecimientos comerciales, horas extraordinarias, descansos semanales, pago de remuneraciones y feriado anual.

El senador Muñoz, autor del Proyecto de Ley, justificó su presentación en la excesiva extensión de los horarios de trabajo del comercio que han superado con largueza las 12 horas diarias, especialmente durante el mes de diciembre recién pasado, privando a los trabajadores del comercio de permanecer junto a sus familias más allá de cualquier límite razonable.

El parlamentario recordó que el pacto acordado por las principales organizaciones de trabajadores del comercio, entidades gremiales y la Dirección del Trabajo, que establecía jornadas razonables de cierre fue incumplido por un sector de la parte empleadora, provocando el repudio generalizado tanto por dirigentes de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), el cardenal Francisco Javier Errazúriz y el presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio Alfredo Ovalle (CPC), quién apoyó drásticas sanciones a quienes vulneren los acuerdos laborales.

En el mismo sentido el senador Muñoz recordó que las multas existentes en nuestra legislación, por sus bajos montos, no tienen carácter disuasivo en el caso de los responsables del gran comercio que extienden arbitrariamente la jornada de trabajo y hacen improbable la aplicación de normas laborales más flexibles en el futuro, pues por el contrario, parte del empresariado se niega a cumplir los mínimos criterios para pensar siquiera en un pacto social, requisito indispensable para cualquier país que aspire al desarrollo.

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