El senador magallánico Pedro Muñoz desestimó las declaraciones efectuadas por el presidente de la CPC (Confederación de la Producción y el Comercio) Hernán Sommerville en orden a manifestar preocupación frente al Proyecto de Ley sobre Subcontratación y Trabajo Temporal que se tramita actualmente en el Senado, y señaló que no representan novedad respecto a la postura mantenida por el empresariado con anterioridad, pues según Muñoz este sostenidamente se ha negado a discutir acerca de la externalización de servicios.“Para la CPC la inclusión de normas que definan con claridad el concepto de empresa, para de esta forma determinar quién es efectivamente un contratista y quién simula contratos para terceros, es una medida que tornará menos flexible el empleo. Pero ello no es efectivo, pues de lo que se trata es de sancionar una práctica tan abusiva como extendida que es el emplear trabajadores para realizar una faena específica por medio de un contratista que resulta en la práctica ser un mero intermediario, frecuentemente asociado al mandante a través de empresas de fachada”, afirmó el parlamentario socialista.
Según Pedro Muñoz si al trabajador se le adeudan salarios este se ve obligado a demandar al subcontratista que a veces no tiene patrimonio para responder, en tanto la empresa que recurrió a los contratistas externos se desentiende del problema puesto que sólo agotando toda instancia judicial ante el subcontratista es posible bajo la actual legislación exigir compensaciones a la empresa mandante .
“No es presentable ante la ciudadanía que se haga ver como incompatible la posibilidad de trabajo regulado con el aumento del empleo y lamentablemente esta ha sido la actitud frecuentemente asumida por el gran empresariado nacional. Una posición reticente a establecer un pacto social que realmente establezca deberes y obligaciones entre el personal y sus verdaderos empleadores, quienes diluyen su responsabilidad con el trabajador amparándose en múltiples razones sociales que no responden ni a la realidad de la empresa ni a la naturaleza de la labor efectuada”, señaló el legislador integrante de la Comisión de Trabajo y Previsión Social.
El senador afirmó que desde el año 1979 la subcontratación de funciones no es regulada y ha traído consigo el despido de trabajadores que son nuevamente contratados por menos sueldo a través de un intermediario simulado, además de la desprotección de los trabajadores reclutados para labores agrícolas ocasionales que con el proyecto, afirmo el congresista, serán responsabilidad del dueño del predio o faena y no del “enganchador”, como generalmente se los conoce.
“La actitud un tanto dramática por parte del empresariado en cuanto a que el proyecto de subcontratación ocasionará menoscabo a la economía del país recuerda cuando se dijo en su momento que las reformas laborales aprobadas bajo las anteriores administraciones de la Concertación significarían el fin del crecimiento económico, cesantía y el fin de la inversión privada en Chile, todas aseveraciones que la realidad ha desmentido”, señaló el parlamentario.
El Proyecto de Ley de Subcontratación se encuentra en su fase final en el Senado y en caso de ser aprobado regulará la actividad contractual de cajeros de bancos y supermercados, vendedores de multitienda y otros trabajos que suman alrededor de 500 mil empleos en la actualidad.
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