Abogó por insistir en la materia con otra iniciativa legal que consagre también el derecho a la huelga
El senador Pedro Muñoz (PS), integrante de la Comisión de Trabajo y Previsión Social, lamentó el rechazo del proyecto de reforma constitucional que permitiría que los funcionarios públicos negociaran colectivamente. La Sala de la Cámara Alta votó el pasado miércoles una propuesta de los senadores Hernán Larraín, García, Letelier, Sabag y Pérez Varela que modificaba la Carta Fundamental con el objeto de explicitar este derecho. El texto contó con 21 votos afirmativos y 8 abstenciones, pero no alcanzó el quórum de 25 senadores que requería para ser aprobado.
Muñoz, quien también ha impulsado el reconocimiento del derecho de estos trabajadores a negociar colectivamente y había presentado la primera iniciativa sobre la materia el 2008, señaló su disconformidad por la resolución de la Cámara Alta, manifestando que “se trata de sincerar una situación ya existente y cumplir el Convenio 151 de la Organización Internacional del Trabajo, que obliga a los estados miembros a incluirlo en su legislación.
“Sabemos que la negociación colectiva es el mejor instrumento que tienen los trabajadores para mejorar sus condiciones laborales y que se requiere avanzar en su extensión, por tanto, es importante que el sector público predique con el ejemplo, reconociéndolo expresamente para su personal.” – afirmó.
“Lamentamos que buena parte de los senadores de la derecha no hayan querido respaldar esta modificación, argumentando que no se encontraba definido el texto legal que complementaría la reforma a la Constitución, pero esperamos que arribando a consenso sobre esos aspectos pueda avanzarse” – indicó.
Muñoz abogó, entonces, por continuar insistiendo con esa enmienda a la Constitución, que calificó como una sentida aspiración de los funcionarios públicos. Al respecto, informó que procurará reponer el debate poniendo en discusión una moción de su autoría que aborda la materia desde otra perspectiva, cual es el reconocimiento del derecho a huelga.
Explicó que, acorde al pensamiento de los redactores de la actual Carta Fundamental, en nuestro país se da la paradoja que la Constitución no se refiere al derecho a la huelga, sino para negarlo en determinados casos, alterando la lógica fundamental que implica reconocer primero la garantía para luego disponer, si corresponde, algunas excepciones o restricciones. “Esperamos, entonces, que a través de ese proyecto se pueda volver a discutir esta materia con mayor éxito.” – sentenció.
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