julio 30, 2010

LA MATANZA DE LA FEDERACIÓN OBRERA DE MAGALLANES

Intervención leída el miércoles 27 de julio en el Hemiciclo del Senado.

Señor Presidente, Honorables Colegas:

Hoy 27 de Julio se conmemoran 90 años de uno de los hechos más trágicos y lamentables que recuerde la historia sindical chilena y la historia de la Patagonia: el asalto e incendio de la Federación Obrera de Magallanes.

Se vivía un contexto complejo. A nivel internacional, la revolución rusa había significado un profundo impacto. Los movimientos populares se encontraban en ascenso en todo el orbe y cundía una gran preocupación en los sectores más conservadores y grupos gobernantes.

En nuestro país, el Gobierno de Sanfuentes culminaba con dificultades y Arturo Alessandri figuraba como gran favorito para las elecciones, encarnando, precisamente, a los sectores más desposeídos. En medio de esa situación, con el probable objeto de distraer la atención y de alejar de Santiago a buena parte de la tropa adicta al León de Tarapacá, el Ministro de Defensa de la época, Ladislao Errázuriz, arguyó un posible conflicto con el Perú y ordenó movilizar parte del Ejército al norte.

En todo el país se generó una gran incertidumbre. Sectores de la burguesía respaldaban al Gobierno ante este artificial impasse con el vecino país, en tanto estudiantes y sindicalistas, de vocación pacifista, estimaron que el suceso era un volador de luces, rechazaban la militarización del país y exigían, en cambio, respuestas y soluciones a la crisis social.

El Gobierno se enfrascó en una áspera disputa con los estudiantes. Producto de la crispación la sede de la FECH en Santiago fue incendiada y la organización disuelta. La disputa se extendió por todo el país. Patriotas, estudiantes y obreros, se enfrentaban verbalmente, utilizando sus organizaciones y medios de comunicación.

Magallanes no fue la excepción. La Liga Patriótica de Magallanes, entidad representativa del empresariado y la burguesía local, tras renovar su directiva, convocaba a un comicio o mitín “patriótico” para el 25 de Julio, con el objeto de respaldar al Gobierno de Sanfuentes ante la inminente confrontación bélica, rechazando la actitud de los estudiantes. No era un día cualquiera. Ese mismo 25 de Julio se reunirían los electores habilitados para elegir al Presidente de la República.

La Federación Obrera de Magallanes no adhirió ni rechazó participar en el acto, pero cuestionaba, a través de su prensa afín, principalmente el periódico El Magallanes la movilización de tropas que tenía lugar en todo el país.

El domingo 25, se efectuó en la Plaza de Armas de Punta Arenas, el mitin organizado por la Liga Patriótica. Unas 700 personas escucharon las arengas de sus dirigentes.

Paralelamente, a unas cuadras, en la sede de la Federación Obrera tenía lugar su tradicional actividad de los domingos, en que números artísticos entretenían a los trabajadores y sus familias.

El tenso clima que se vivía ya desde días anteriores dio paso a un germen de violencia. Al término del mitin de la Liga Patriótica, un grupo de varios centenares de manifestantes se dirigieron a la sede obrera, en la cual pernoctaban algunos trabajadores encargados de su resguardo. Estos no respondieron a las agresiones, por lo que la turba se dirigió al periódico El Magallanes con la misma intención beligerante.

Los hechos no pasaron a mayores. Pero sí ocurriría al día subsiguiente.

La madrugada del 27 de julio, aproximadamente a las 2 de la mañana, efectivos militares y policiales, unidos a las denominadas guardias blancas, grupos de civiles adictos a la Liga Patriótica, se fueron apostando hasta rodear la sede sindical por todos sus accesos.

Los reportes de la época cuentan que cerca de las 3 de la madrugada, los asaltantes abrieron fuego contra la sede obrera. Tras una hora de disparos, derrumbaron las puertas e incendiaron la casona. Hubo una débil resistencia desde el interior.

La sede resulta enteramente quemada. También la imprenta del Diario El Trabajo que funcionaba en el mismo lugar. Las dependencias del Diario “El Socialista”, a pocas cuadras, fue también siniestrada. Hogares de dirigentes sindicales también sufrieron los embates de las hordas.

Al día siguiente, la ciudad amaneció bajo el estado de sitio y censura de prensa, decretado por el Gobernador. La ciudadanía permanecía atemorizada y se insinuaban protestas laborales, fundamentalmente de los gremios mineros, en solidaridad con los obreros asesinados. En los días siguientes empleadores y las autoridades se encargaron de reprimir el movimiento y perseguir a sus organizadores.

Se desconoce cabalmente la cantidad de muertos y heridos producto de estos siniestros hechos. El episodio impactó profundamente por su violencia. Investigaciones posteriores desentrañaron los pormenores de los hechos, aunque fracasaron en la determinación de sus responsables.

El fuerte movimiento sindical de la zona sufrió un duro golpe del que no podría recuperarse. Al menos no con la fuerza y masividad que tuvo en los años anteriores.

Hoy 90 años después, en Magallanes se sigue recordando estos sucesos. A las tradicionales ofrendas a los mártires en el cementerio local se sumó este año la reinauguración de la Plaza conmemorativa eliminada por la Dictadura Militar, con posterioridad a 1973.

Por lo anterior, he querido recordar este episodio histórico en el Senado de la República y quisiera que se adjuntara copia de esta intervención a la Central Unitaria de Trabajadores de Punta Arenas.

Muchas gracias.

julio 21, 2010

Grave recorte presupuestario afecta a Natales

Recursos aportados para ejecución de proyectos alcanza a sólo un 10% de lo previsto.

Este martes me reuní en Puerto Natales con el Alcalde Fernando Paredes y el cuerpo de concejales de la ciudad, quienes me expresaron su inquietud por el recorte presupuestario que ha sufrido la comuna, como consecuencia de las reasignaciones efectuadas por el Gobierno Regional para cumplir con los instructivos presidenciales referidos a la superación de la emergencia en la zona central del país, producto del terremoto del 27 de Febrero.

El Alcalde Paredes y los ediles de la capital de la Provincia de Última Esperanza me expusieron que la cuantía de la disminución aplicada a la ciudad es enorme, pues sólo se ha confirmado la ejecución de 6 proyectos por un total de $ 265 millones. A lo anterior, podrían sumarse unos $ 767 millones adicionales, a fines del presente año o comienzos del 2011, lo que en todo caso es incierto.

Si consideramos que hay $265 millones, respecto de una cartera total que se encontraba aprobada de más de $ 2.300 millones, tenemos que a Natales se le ha recortado el 90% de los recursos previstos, lo que es muy grave y afectará, sin duda, sus planes de desarrollo y el empleo. La liberación de los cerca de $ 800 millones adicionales atenuaría la situación, pero aún así, en el mejor de los casos, Puerto Natales sería privado entre el 2010 y el 2011 de unos $1.200 millones de pesos, lo que es una cifra muy relevante para cualquier municipio.
Esta situación es de extrema gravedad y constituye un castigo para una comuna que se ha caracterizado por un trabajo serio y de calidad, que se ha expresado en la formulación y aprobación de numerosas iniciativas de adelanto, cuya materialización está ahora en riesgo.

Esto es consecuencia de los recortes aplicados en todo el país con ocasión del terremoto, sin tener en cuenta el impacto que la inversión pública tiene en Magallanes y cuyos efectos ya se están sintiendo en pérdida de dinamismo económico y desempleo.

Se requiere que el Gobierno Regional haga ver con fuerza estos argumentos para obtener, a la brevedad, nuevos recursos que logren materializar más proyectos en Natales y en general en toda la región. Recientemente, el Parlamento ha aprobado un paquete financiero por más de $ 3.000 millones destinados a la reconstrucción, por lo que se empieza a contar con recursos que le permiten comenzar a restituir a las regiones los dineros recortados.
SOLICITUD A LA SUBDERE

En horas de la tarde de este miércoles, me comuniqué con el Subsecretario de Desarrollo Regional, Miguel Flores, a quien expresé mi inquietud por la situación que atraviesa el municipio natalino, solicitándole concretamente aumentar los fondos disponibles para la ejecución de proyectos de inversión en la comuna.

El Subsecretario me indicó que conocía el problema y me informó que pediría al Alcalde Fernando Paredes priorizar los proyectos según su impacto en la generación de empleo, con el objeto que puedan ir siendo ejecutados con nuevos recursos que la SUBDERE podría autorizar al Gobierno Regional y, respecto de los cuales, se tendrá una decisión en las próximas semanas.

Me parece importante la disposición e interés del Subsecretario Flores en resolver la situación, por lo que espero que a más tardar a comienzos de Agosto puedan dar frutos estas gestiones y obtenerse la aprobación para comenzar a ejecutar algunas iniciativas adicionales en la capital de la Provincia de Última Esperanza.

julio 14, 2010

Es lamentable el uso político de la pobreza

Sin la protección social impulsada por la Presidenta Bachelet el incremento hubiera sido mucho mayor.

Es lamentable que la odiosidad promovida por el actual Gobierno en contra de la administración anterior y el empeño en criticar cualquier cosa para intentar enlodar a la ex Presidenta Bachelet, hace que parezca que muchos se alegran del aumento de la pobreza por tener un flanco más de críticas.

El desafío de erradicar la miseria extrema en el país es un objetivo nacional de la máxima trascendencia, para lo cual se cuenta con muchas políticas de largo alcance y surgidas de amplios consensos, por lo que utilizar estas cifras y las dificultades de tantos chilenos con fines políticos es un hecho repudiable.

Respecto de las cifras de la CASEN 2009, en primer hay que valorarlas en una perspectiva más amplia, que indica que en 20 años las políticas sociales de la Concertación lograron disminuir la pobreza a la mitad. En lo que se refiere al incremento registrado en la muestra del 2009, ello se explica fundamentalmente por el entorno en que se realizó, en medio de la crisis financiera y, en lo puntual, por el aumento sustantivo en la línea de pobreza.

El actual Gobierno parece que se olvidó que hubo una crisis financiera mundial, con cesantía y pérdida de dinamismo económico, en que muchas entidades internacionales pronosticaron un drástico incremento en la pobreza en América Latina y, por el contrario, precisamente gracias a las políticas y el apoyo a los sectores más desvalidos impulsadas por el Gobierno de la Presidenta Bachelet, ella logró ser muy moderada.

En términos más precisos y técnicos, la línea de corte utilizada para distinguir la condición de pobreza registraba un incremento entre muestra y muestra de unos 3.000 o 4.000 pesos, así ésta fue de $ 40.562 per cápita el año 2000, $ 43,712 el 2003 y $ 47.009 el 2006. Sin embargo, indicó que el año 2009 el guarismo llegó a $ 64.134, vale decir un notorio incremento de $ 17.000, motivado en el alza en el precio de los abarrotes. Evidentemente, un aumento de esa magnitud en la línea de corte, frente a salarios que han registrado incrementos muy inferiores deja a mucha gente bajo la línea de pobreza.

Sería conveniente que el Gobierno depusiera esta odiosidad y asumiera las cifras con la seriedad que merecen, situándolas en el contexto y analizándolas con rigor, por respeto a los miles de personas que sufren día a día la pobreza, sin pretender sacar pequeños provechos políticos que sólo apartan del desafío de trabajar conjuntamente para derrotar este flagelo y lograr que todos los chilenos cuenten, a la brevedad, con sus necesidades básicas resueltas.

julio 10, 2010

Gobierno es responsable del alza en la cesantía en Magallanes

La administración de Sebastián Piñera es la principal responsable del incremento que registra la cesantía en Magallanes, producto de los recortes presupuestarios aplicados con ocasión del terremoto del 27 de febrero. Estamos ya en un 6% de desempleados, sin que aún se haga sentir el impacto de los meses más crudos del invierno.

El Gobierno debe reconocer que cometió un grave error en el recorte presupuestario, al disminuir por igual los recursos de todas las regiones, sin considerar las distintas realidades que enfrentan. El Presidente Piñera y su equipo cedieron a sus dogmas neoliberales y fueron incapaces de advertir el impacto de la inversión pública en una zona aislada y con un mercado pequeño como Magallanes, más aún cuando no se propició un diálogo que asegurara la recuperación de los recursos en los próximos años y con ello la estabilidad en los proyectos y la confianza en las empresas contratistas.

Especialmente preocupante la situación de la construcción, una de las actividades más intensiva en la contratación de mano de obra, respecto de la cual sus dirigentes gremiales han estimado en unos 2.600 puestos los puestos de empleo perdidos, vale decir un tercio de los trabajadores con que se contaba al comenzar el 2010.

Lo peor es que presumiblemente dichas cifras seguirán aumentando, al culminarse algunos proyectos en actual ejecución y ser incierta la realización de nuevas inversiones. La existencia de una cartera de $ 9.000 millones en la más completa incertidumbre, ciertamente afecta todas las proyecciones y configura un muy mal pronóstico, con empresas que deberán cerrar o emigrar.

El Gobierno central debe convencerse de reponer a la brevedad los recursos que se han restado al gobierno regional para reactivar la inversión pública y dinamizar el empleo. Aún es tiempo de reconocer el error y enmendar rumbos, ejecutando proyectos que permitan darle un impulso a la contratación de trabajadores.